¡Bienvenido, frutadicto! Esta página recoge exquisitas recetas de tartar de frutas, una forma original y atractiva de presentar nuestros postres más dulces, naturales y refrescantes.

Tartar de fresas y mango con albahaca y limón verde

Tartar de fresas con mascarpone

Tartar de cerezas

Tartar de melocotón

Tartar de frutas tropicales

Tartar de mango

Tartar de plátano

Tartar de piña y fresa
Aunque hay frutas, como el aguacate o el mango, que son utilizadas como base de un gran número de tartares de carne, pescado o verdura, la fórmula sirve igualmente para cuando ellas son el elemento principal del plato.
Índice de contenidos
- Tartar de fresas y mango con albahaca y limón verde
- Tartar de fresas con mascarpone
- Tartar de cerezas
- Tartar de melocotón
- Tartar de frutas tropicales
- Tartar de mango
- Tartar de plátano
- Tartar de piña y fresa
- Recetas de tartar de frutas
- Cómo hacer un tartar de fruta
- Además de preparar un tartar con frutas también puedes cocinar…
Recetas de tartar de frutas
La enorme cantidad de frutas que tenemos a nuestra disposición, sumada a la mezcla con otros ingredientes, abre un mar de posibilidades a la hora crear cada vez un nuevo tartar dulce.
Difícil será casar dos frutas que no se lleven bien, de modo que la experimentación en la cocina con un tartar frutícola puede convertirte en autor de recetas originales que triunfen.
Lo normal será presentarlos como postres, pero también es posible servirlos entre platos cuando el menú es muy copioso. Como si fuera un sorbete, pero con otra forma de tomarlo.
Las frutas tropicales se prestan muy bien a este tipo de preparaciones en crudo por su amplia gama de dulzor y acidez, y son especialmente bienvenidos en los meses de calor por su carácter refrescante.
La combinación con helado, cacao, chocolate o especias añadirá a nuestros platos un toque especial, si bien aumentará como es lógica la carga calórica. Pero, bueno, si no es para comerlo a diario, un día es un día, ¿verdad?

Cómo hacer un tartar de fruta
No encontrarás gran diferencia respecto a lo que supone hacer una macedonia. Se trata de cortar las frutas en trocitos del mismo tamaño, de la forma más regular posible y casi siempre sin piel ni pepitas.
Recuerda que es importante siempre lavar las frutas antes de consumirlas para eliminar restos de tierra, polvo o pesticidas.
Pero no cometas el error de lavarlas inmediatamente después de comprarlas si no las vas a comer en ese momento, ni tampoco hacerlo tras haberlas cortado.
Una forma de lavar bien las frutas es hacerlo en un litro de agua donde antes hayamos diluido una cucharada de bicarbonato. Otra manera es con una medida de vinagre por cada tres de agua.
Ah, y siempre con agua fría, nunca con caliente, y quitándoles antes los tallos a las frutas que los tengan para limpiar todos los recovecos donde pueda haber algo de suciedad.
Si se trata de frutas pequeñas, colocándolas en un colador evitarás que se dañen durante el lavado.
Dependiendo del tipo de fruta que utilices, y de la antelación con que vayas a preparar tu tartar, es posible que debas mantener los trozos sumergidos en algún zumo para evitar que se oxiden y pierdan su color natural.
Aunque el hecho de que se oscurezca no significará necesariamente que la fruta esté mala, su aspecto será menos apetitoso. ¡Y por los ojos también se come!
En cualquier caso, la «salsa» de un tartar de frutas suele ser precisamente un zumo o una mezcla de néctares. El yogur es otro de los «aderezos» más habituales para este tipo de postres.
A la hora de emplatar, puedes usar un hojaldre como base. Echa mano de algún molde para darle forma a tu tartar y decóralo bonito con alguna pieza de fruta entera o laminada, unos frutos secos para darle un toque crujiente, alguna ramita aromática, helado, aires o espumas.
¡Deja volar tu imaginación y a cocinar!